Reconstruyendo vida con microcirugía

Mar 05 de 2016 0
En Colombia existen pocos centros especializados en microcirugía; los hay en Bogotá, Medellín, Bucaramanga, Cali, entre otros. La Costa apenas arranca con sus primeros ‘pinitos’.
No todos los médicos se dedican a ella, el desgaste es grande, sumamente exigente y sí, requiere de una persona paciente, detallista y muy meticulosa. Se trata de la microcirugía, una técnica quirúrgica, que emplea medios ópticos e instrumental de precisión, para aplicarla a diferentes especialidades quirúrgicas. (Cirugía Ortopédica y Traumatológica, Cirugía Plástica, Cirugía Oncológica de cabeza y cuello, Cirugía Oftalmológica y Cirugía Otorrinolaringológica).

En Colombia existen pocos centros especializados en microcirugía; los hay en Bogotá, Medellín, Bucaramanga, Cali, entre otros. La Costa apenas arranca con sus primeros ‘pinitos’.
“La microcirugía es una herramienta determinante en reconstrucción, porque uno puede trasladar tejido de áreas distantes con la particularidad que debe llevar su vascularidad y reconstruir grandes defectos en un área de la cara o el cráneo que quedó amputada después de una cirugía radical. Su nombre es micro pero es una gran cirugía, esta lleva entre 10 y 12 horas, son sumamente exigentes, y el entrenamiento es permanente, es por ello que son pocos los microcirujanos, el desgaste es alto, pero el esfuerzo vale la pena porque uno puede reconstruir una zona de cabeza y cuello, esencial en funciones básicas como comer, pero también puede devolverle la apariencia, la vida social a la persona” señaló Einstein Alfredo Viana, Cirujano Oncólogo de Cabeza y Cuello.

La microcirugía permite solucionar problemas quirúrgicos que con las técnicas convencionales no es posible (por ello algunos casos eran considerados inoperables), pues precisan el ensamblaje del tejido distante a la zona del defecto a través de la unión entre arterias y venas de pequeño calibre, de 0,5 mm.  a 1 mm. de diámetro.

Volver a vivir
Este tipo de cirugías no solo permite rescatar los pacientes con cáncer sino devolverles su vida social, no solo se trata de la parte estética, sino también de sus funciones fisiológicas, como comer y hablar.
Globalmente la sobrevida del cáncer de cabeza y cuello sigue siendo modesta pero lo que más haavanzado en los últimos veinte años han sido los métodos y técnicas de reconstrucción para hacer las cirugías más funcionales y cosméticas. Viana ha tenido varios casos de mujeres que habían quedado sin lengua por un cáncer. Ahora tienen este órgano gracias a un colgajo radial y microcirugía. La lengua nueva la sacaron de un antebrazo y con técnicas de microcirugía se logra la unión vascular entre la arteria radial y los vasos faciales del cuello.

Caso impactante
A la trayectoria médica del cirujano Viana se le cruzó un reto más que profesional, se trata del caso de una mujer que vivió más de 10 años con un tumor benigno en la cabeza que terminó deformando la mandíbula en su totalidad. Aparte de su dolor físico, a esa mujer le dolía el alma, pues vivía aislada en un rincón de la casa y no salía por temor a las burlas, su autoestima estaba por el suelo. No se asomaba a la calle porque los niños se asustaban y salían corriendo. Tenía que cubrirse la cara todo el tiempo.
“Usando las técnicas de reconstrucción microvascularizadas se extrae primero la totalidad del tumor y se hace una nueva mandíbula usando el hueso peroné. Este colgajo compuesto libre de peroné es técnicamente exigente porque hay que preservar su arteria y sus venas junto con parte del músculo de la piel para poder reconstruir todo el piso de la boca y el maxilar inferior devolviéndole al paciente la expresión y la apariencia”, explica el especialista.
Esta es la primera reconstrucción mandibular que se hace en toda la Costa, usando la técnica de microcirugía, en la que  médicos especializados como Viana,  además de usar el hueso peroné moldeado, lo unieron a una placa de titanio y realizaron la anastomosis o unión de los vasos sanguíneos del colgajo de la pierna a los vasos receptores en el cuello con un microscopio que magnifica el campo visual. 
“Lo importante de la microcirugía es que no solo recobra la función sino la cosmesis, les mejoramos el contorno, la apariencia. La cirugía se hace en un solo tiempo, permite que el tejido que uno lleva se adapte nuevamente y después en una fase relativamente temprana se le hace la rehabilitación, y vuelven a tener dientes dado que el hueso tiene su propia circulación”, agrega Viana.

¿Y el peroné queda funcional?
Algunos se preguntarán cómo es eso de reconstruir una mandíbula con el peroné (hueso de la pierna) y lo cierto es que es muy útil y lo mejor es que la pierna no se ve afectada en su función.  El oncólogo Viana lo explica así: “Lo bueno de la micro es que uno puede usar el tejido que necesita con una baja afectación en la zona dadora de la pierna, generalmente menor al 5 %. La parte donde se articulan los huesos de la pierna no se saca y de este modo la articulación queda estable, es decir, la persona vuelve a caminar sin ningún problema”, destacó.

Existen varios métodos reconstructivos que incluyen usar costillas, hueso de la cresta ilíaca, pero la ventaja de la microcirugía con peroné sobre las demás es que al tener su propia irrigación sanguínea producto de la unión microscópica con los vasos del cuello, la supervivencia del colgajo es de por vida, pudiéndose incluso colocar implantes dentarios y lograr una aceptable rehabilitación funcional y estética”.

Fuente: eluniversal.com.co 

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